Discursos y otros documentos del Secretario General

DÍA DE LAS MUJERES EN LA DIPLOMACIA

19 de julio de 2023 - Washington, DC

En el día de las mujeres en la diplomacia destacamos las contribuciones de las mujeres Representantes Permanentes ante la OEA, que han formado y que siguen formando un componente crítico del trabajo de la Organización.

También reconocer en ese mismo componente crítico y fundamental del trabajo de la Organización a cada una de las delegadas y a cada una de las funcionarias de la OEA.

En 1997, el Comité sobre la Eliminación de todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (Comité CEDAW), en su Recomendación General 23 sobre “Vida política y pública” afirmó que “…los gobiernos deben garantizar la presencia de la mujer en todos los niveles y esferas de las relaciones internacionales, lo que exige que se las incluya en la representación de su gobierno en cuestiones económicas y militares, en la diplomacia bilateral y multilateral y en las delegaciones oficiales que asisten a conferencias regionales e internacionales”.

Aunque desde entonces, ha habido avances importantes en cuanto al número de mujeres que participan en el servicio exterior de todos los países de la región, vemos el mismo patrón repetido en todas partes.

Las mujeres son la mayoría del personal de apoyo de los rangos menores, tanto en las cancillerías como en las misiones – y una minoría en el liderazgo, particularmente en los puestos más estratégicos de toma de decisiones y de negociación de relaciones y acuerdos.

Casi 30 años más tarde, el Comité CEDAW sigue llamando la atención sobre las brechas de género en el servicio exterior – no solo en términos del menor número de mujeres- sino también en términos de las oportunidades de ascenso o las prestaciones familiares que se les otorguen a mujeres y hombres, a veces todavía de manera diferencial, así como los recursos disponibles para mujeres que se enfrentan con el acoso sexual en su trabajo diplomático.

La importancia de este tema no es solo de representación formal o visual, las mujeres son 50 por ciento de la población de cada país y deberían ser 50 por ciento de las personas encargadas de representar al país, también en la sustancia.

Las mujeres aportan perspectivas y experiencias distintas, ya sea en las áreas de la igualdad, la no discriminación y los derechos humanos y también en áreas como el comercio, resolución de conflictos, construcción de la paz, la gestión del medio ambiente, el uso de los recursos naturales, la migración y la cooperación bilateral y multilateral.

Como destaca el Comité CEDAW: “La inclusión de una masa crítica de mujeres en las negociaciones internacionales, las actividades de mantenimiento de la paz, todos los niveles de la diplomacia preventiva, la mediación, la asistencia humanitaria, la reconciliación social, las negociaciones de paz y el sistema internacional de justicia penal cambiará las cosas. Al considerar los conflictos armados y de otro tipo, la perspectiva y el análisis basados en el género son necesarios para comprender los distintos efectos que tienen mujeres y hombres”.

En las márgenes de la Asamblea General de la OEA, la CIM ha venido gestionando encuentros con mujeres cancilleres, empezando en 2016, en la República Dominicana, cuando eran 13 mujeres Ministras de Relaciones Exteriores, o un tercio de los Estados Miembros de la OEA. Desde entonces el número ha vuelto a bajar y actualmente hay siete mujeres cancilleres.

Aquí en la OEA, el número de mujeres Representantes Permanentes también varía de un período a otro – aunque nunca se ha alcanzado (o superado) la paridad. Desde 2019, cuando eran 12 mujeres (o un 35 por ciento de los Estados Miembros), ahora ha bajado a ocho mujeres (23 por ciento de los Estados Miembros).

El liderazgo de las mujeres en todos los ámbitos – desde el hogar hasta el multilateralismo – ha generado avances durante el último siglo que ha cambiado radicalmente al mundo. Es imposible pensar hoy día en volver al mundo donde las mujeres eran solamente un bien más de los hombres, sin derechos, sin voz, sin agencia.

Por otro lado, un número cada vez mayor de países han adoptado o se han comprometido con la elaboración de Políticas exteriores “feministas”, las Américas está siendo pionero en este movimiento.

Estas políticas buscan:

• Representación: aumentar la participación y también el liderazgo de las mujeres, en el servicio exterior y como prioridad de la diplomacia y la cooperación.
• Derechos: dar prioridad a los derechos de las mujeres y la igualdad de género en la agenda global – particularmente en los foros regionales e internacionales como la OEA y Naciones Unidas.
• Recursos: dedicar una mayor proporción de la ayuda internacional al desarrollo a proyectos específicamente orientados al empoderamiento de las mujeres y las niñas e insistir como objetivo de la diplomacia que una mayor proporción de los recursos públicos se destinen a las necesidades y las demandas de las mujeres.

La política exterior feminista reconoce que la igualdad entre mujeres y hombres es un sine que non para el desarrollo económico sostenible, la efectiva gestión del medio ambiente y la seguridad y la paz, con base en cada vez más evidencia de la relación entre la igualdad y la estabilidad.

En esta conmemoración, identifiquemos y abordemos las oportunidades y obstáculos que enfrentan en su labor diplomático, particularmente en cuanto al avance de la agenda de género.

También potenciemos la presencia de las mujeres en la diplomacia, para potenciar la agenda por los derechos de las mujeres y la igualdad de género.

Muchas gracias