Discursos y otros documentos del Secretario General

DURANTE LA REUNIÓN EXTRAORDINARIA DEL CONSEJO PERMANENTE DE LA OEA PARA RECIBIR AL CANCILLER DE REPÚBLICA DOMINICANA, ROBERTO ÁLVAREZ

12 de octubre de 2023 - Washington, DC

Estamos reunidos hoy para utilizar a nuestra Organización en lo que tiene mejor, en lo que fue uno de los propósitos para la que fue creada: ser el espacio para velar por el entendimiento en paz entre sus miembros. Es así como todos los conflictos entre nuestros países se han encaminado siempre hacia una solución, y en muchos de ellos la Organización ha jugado un papel fundamental acercando a las partes, proponiéndoles vías de entendimiento, ofreciendo los espacios necesarios para el diálogo.

Es por ello que, ante la situación existente entre la República Dominicana y Haití por la construcción de un canal por parte de Haití en el rio Dajabón o Masacre, la Secretaría General de la OEA comunicó a ambos países su plena disposición para colaborar en la búsqueda de una solución benéfica para ambas partes. Como lo expresáramos entonces, y lo reafirmamos hoy, estamos confiados que las dos partes tienen las capacidades para asegurar a la otra la buena fe para resolver estos temas, y ello conforme al Derecho Internacional y los tratados vigentes entre ellos. Insistimos en lo que se ha dicho acá: la actual situación no beneficia a ninguna de las partes.

A ambos países les une, y les unirá siempre, un espacio común con sus riquezas y recursos compartidos, con sus desafíos comunes, y con la necesidad de cooperar en una cada vez mejor convivencia. Ninguno de los dos países puede ser insensible a lo que ocurre en el otro. En definitiva, la relación estrecha entre las poblaciones de ambos no puede tolerar desavenencias que la pongan en riesgo.

Desde la creación misma del Sistema Interamericano, ambos países han compartido el principio de la solución pacífica de sus controversias, como lo han hecho todos los demás países americanos.

República Dominicana y Haití lo han ratificado una y otra vez. Ya en 1929, el Tratado de Paz, Amistad y Arbitraje consagró “una situación perpetua de paz y amistad, de acuerdo con el ideal de fraternidad panamericana” entre ambos países. Dicho tratado, con sabiduría y previsión, reguló en su artículo 10 el uso por ambas partes de ríos y otros cursos de agua compartidos que “nacen en el territorio de un Estado y corren por el territorio de otro o sirven de límites entre los dos Estados”, y dice los presupuestos para que el uso de estos recursos comunes sea justo y equitativo.

Ambos países son miembros fundadores de la OEA, cuya Carta establece que las controversias deben ser resueltas por medios pacíficos. Ambos son también parte del Tratado Americano de Soluciones Pacíficas, Pacto de Bogotá de 1948, por el que se obligan en todo tiempo a acudir a alguno de los procedimientos pacíficos allí previstos para resolver sus controversias.

Por otra parte, la Organización, toda ella, tiene entre sus propósitos el de “asegurar la solución pacífica de controversias que surjan entre los Estados Miembros”. Este propósito obliga y guía el trabajo de la Secretaría General.

En respuesta al comunicado de la Secretaría General, tanto el Gobierno de la República Dominicana como el Gobierno de Haití aceptaron nuestra propuesta de facilitar la búsqueda de una solución a la a situación existente.

Esta disposición al diálogo muestra la buena voluntad de ambos países en llegar a una solución conveniente para todos, que tenga en cuenta los intereses y necesidades de unos y otros en el aprovechamiento de recursos que comparten hoy y compartirán mañana.

En base a ello, nos permitimos proponerles una reunión de ambas delegaciones, facilitada por la Secretaría General en un lugar a ser determinado de común acuerdo, de la cual estamos seguros lograremos poner fin a esta situación en beneficio de las poblaciones de ambos países en el pleno respeto del derecho internacional que nos es común.

Por otra parte, estamos dispuestos al envío inmediato de una misión técnica tanto en lo que refiere a recursos hídricos como en temas legales para visitar el lugar y hacer un informe al respecto.

También debo decir que he realizado contactos con la presidencia del CARICOM, con el canciller de Dominica, Vince Henderson, a quien he solicitado apoyo y que se sume a este proceso de diálogo, porque estoy seguro contará con el apoyo de todas las partes.

Agradezco mucho esta oportunidad, deseando seguir trabajando para lograr una pronta solución a este diferendo.

Muchas gracias