Comunicado de Prensa


Secretario General de la OEA insta al Hemisferio a adoptar un papel más activo en la agenda global

  17 de febrero de 2015

El Secretario General de la Organizacion de los Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, pronunció el lunes una conferencia magistral en el foro "México en el Mundo: Diagnóstico y Perspectivas de las Relaciones Internacionales", organizado por el Senado mexicano y la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), en la que analizó las ventajas, estrategias y limitaciones para hacer que el continente americano tenga una mayor incidencia y participación en la agenda global.

En su presentación, titulada “Retos y perspectivas de las relaciones hemisféricas”, el Secretario General Insulza analizó la evolución del ámbito político internacional, las expectativas y los nuevos retos que se avecinaron con el fin hace 25 años de la Guerra Fría. “Muchos analistas de la realidad internacional que habían puesto la confrontación bipolar al centro de sus explicaciones, ya habían comenzado a percibir una relación de confrontación entre las grandes economías del mundo desarrollado como una de competencia económica, en la que el enfrentamiento bélico era reemplazado por la competencia pacífica y por mayores espacios económicos, de capacidad financiera y del predominio tecnológico” explicó.

El jefe de la OEA agregó que uno de los legados de la Guerra Fría fue un sistema internacional que, aunque ya no contaba con hegemonías claras, “se ha mantenido y hasta fortalecido”. “Una de sus características centrales es la conformación de ese sistema por estados nacionales, con sus propios objetivos y defensores”, afirmó. Cuando ese sistema vive momentos de incertidumbre, continuó, “el mayor interés de todos debería ser la preservación del orden global, pero si ese mundo esta constituido por estados individuales, lo que prima en realidad en la retórica es el interés nacional”.

El máximo líder de la institución hemisférica analizó el contexto contemporáneo afirmando que “la política internacional está condicionada por quienes tienen los recursos, por poderes regionales o globales viejos y nuevos que apuntan a proteger sus propios intereses y a buscar alianzas que les permitan hacerlo al menor costo posible”. En tal sentido afirmó que los países intermedios, como son la mayoría de esta región, “son los que requieren del sistema internacional para su sobrevivencia y desarrollo, pero no tienen la fuerza para influir en él por sí solos, por lo que deben buscar hacerlo por medio de las alianzas y los recursos que les proporciona el multilateralismo”.

En su alocución en la Antigua casona de Xicoténcatl en la Ciudad de México, el Secretario General Insulza analizó los aspectos relacionados con la violencia y el terrorismo, y los avances tecnológicos y de globalización que marcan la coyuntura internacional del momento y afirmó que “la realidad en la que debemos hacer política internacional es muy distinta a la de 25 años atrás”, y es en ese nuevo contexto en el que “debemos ubicar los desafíos de nuestro hemisferio en los próximos años”. Habló así de las ventajas especiales con las que cuenta la región para desempeñar un rol importante en el contexto de las relaciones internacionales. “Nos une el interés común de evitar que el hemisferio sea alcanzado por las guerras y conflictos que afectan a otras regiones del mundo. Somos la región que ha estado más ausente de los grandes conflictos que caracterizan la realidad internacional”, señaló.

“América Latina y el Caribe tienen importantes fortalezas que les permiten aspirar a un papel mayor en la escena mundial, entre ellas nuestras riquezas naturales. Somos un continente con superávit de alimentos y energía; en la década reciente se ha incrementado nuestra estabilidad política y hemos tenido un mejor crecimiento económico en términos generales”, explicó, e insistió que en la era de la globalización es necesario “abrirse más al mundo”. “Tenemos aún una inserción internacional insuficiente, lo cual, unido a las debilidades de nuestra propia integración, nos hace perder competitividad; una mayor inserción en la realidad global, como la que requerimos, trae consigo riesgos, pero el desafío es alcanzar presencia y eso significa definir claramente nuestros intereses y prioridades nacionales en política exterior”.

Desde la perspectiva del Secretario General de la OEA esas prioridades y estrategias del rol que debe cumplir el hemisferio en el ámbito internacional están enmarcadas en cuatro grandes áreas. “La primera de ellas es que nuestra política regional debe consolidarnos como un continente de paz, y ello supone concluir los conflictos que aún subsisten, como el conflicto interno en Colombia”, afirmó, y animó a fortalecer y otorgar plena vigencia a instrumentos como el Tratado de Tlatelolco, y a avanzar en temas como la reanudación de las relaciones diplomáticas entre Estados Unidos y Cuba, lo cual permitirá “eliminar un foco de tensión innecesaria que heredamos de la Guerra fría”. Igualmente, instó a tomar acciones para promover y aportar a los intentos de pacificación de Naciones Unidas y a reducir la violencia interna en de los países del hemisferio. “No seremos creíbles como región de paz si en un país de América Central mueren al día por violencia el doble de seres humanos que en Irak o en Siria”, afirmó.

También incluyó en dicha estrategia una política regional que apunte “a fortalecer los procesos de integración y a vincularnos entre si”, y a contar con una región que “siga abriéndose al mundo, manteniendo plenamente vigente su condición hemisférica”. “Europa, la región Asia-Pacifico y América del Norte son el 85 % del total del comercio mundial. La política que muchos países siguen de buscar con ellos acuerdos comerciales y de inversión no sólo es conveniente, sino también indispensable para que puedan crecer en un contexto global”, insistió. En ese sentido, recalcó la importancia de fortalecer las relaciones con la mayor potencia del propio hemisferio, porque “sería absurdo pretender una mayor inserción global sin seguir desarrollando una relación madura con la principal potencia de nuestro hemisferio. Al contrario, más que alentar el ingenuo sueño de sustituir la relación hemisférica, debemos fortalecerla en base a los lazos de comercio, inversión, migración y seguridad y con los valores de democracia, libertad y defensa de los derechos humanos que compartimos”.

El Secretario General Insulza aludió como tercer punto a la necesidad de proteger los recursos naturales y “compartirlos de manera racional, para beneficio de todos nuestros pueblos; somos el continente que se deteriora mas rápidamente con los efectos de cambio climático, la deforestación, y la riqueza de nuestra naturaleza nos impone desafíos enormes”, puntualizó.

Finalmente, afirmó que es necesario “fortalecer nuestros estados nacionales como condición indispensable de nuestro desarrollo”. Para ello, afirmó, América Latina y el Caribe comparten tres grandes problemas: la delincuencia, la desigualdad,y la polarización interna. “Los ciudadanos de hoy no están disponibles para una afirmación de nacionalidad que no contemple la satisfacción de sus necesidades fundamentales”, insistió, y finalizó afirmando que “proyectarnos al mundo divididos, fracturados, como ocurre en muchas naciones de nuestra América, no es la mejor condición para enfrentar los acontecimientos internacionales como debemos”.

El foro sobre política exterior se realiza del 16 al 19 de febrero en la capital de México con el objetivo de analizar las relaciones internacionales del país desde un enfoque multidisciplinario. La conferencia del Secretario General Insulza contó con la presencia de legisladores, embajadores, académicos, servidores públicos, diplomáticos, estudiantes y representantes de la sociedad civil.

Para más información, visite la Web de la OEA en www.oas.org

Referencia: C-043/15