Comunicado de Prensa


Presidente de Colombia disertó ante el Consejo Permanente de la OEA sobre las negociaciones de paz y la lucha contra las drogas

  3 de diciembre de 2013

El Consejo Permanente de la Organización de los Estados Americanos (OEA) recibió hoy en sesión protocolar al Presidente de la República de Colombia, Juan Manuel Santos, quien habló sobre la estrecha relación de su país con la OEA, la importancia de continuar con el debate sobre las alternativas para enfrentar el flagelo de las drogas en la región, y los avances, acuerdos y expectativas de su gobierno y de la comunidad nacional e internacional en los diálogos de paz que se adelantan con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

Al presentar al Presidente Santos, el Secretario General de la OEA, José Miguel Insulza, destacó la valiosa relación que existe entre la institución hemisférica y Colombia y enfatizó la labor que desde hace nueve años realiza la Misión de la OEA de Apoyo al Proceso de Paz (MAPP), la cual “ha acompañado los esfuerzos enormes que su país ha realizado para concluir los conflictos armados que por mucho tiempo le han afectado”. “En el cumplimiento de su trabajo”, apuntó Insulza, “la MAPP ha contado siempre con el respaldo de su gobierno, y creemos haber cumplido una importante labor, bajo su guía, para beneficio del pueblo colombiano”.

El Secretario General Insulza reconoció el liderazgo y trabajo del mandatario colombiano en los diálogos de paz que se desarrollan entre su gobierno y las FARC, e hizo hincapié en que dicha negociación “es posible gracias al esfuerzo de todo un país por rechazar la violencia y construir una institucionalidad moderna para un mejor futuro”. “Conocemos el entusiasmo y energía que usted ha dedicado a esta tarea”, dijo Insulza al Presidente Santos, “y estamos seguros de que este proceso, apoyado por la gran mayoría del pueblo colombiano, llegará a feliz término”, afirmó, a la vez que reiteró la disposición de la OEA para acompañar al país hasta el logro de una paz definitiva.

El máximo representante de la OEA recordó además la realización de la Sexta Cumbre de las Américas en Cartagena de Indias en abril del año pasado, que valoró como “un hito fundamental en la historia reciente del Sistema Interamericano y de nuestra Organización”. En tal sentido, agradeció la confianza depositada en la OEA por la Cumbre, que estuvo liderada por el Presidente Santos, para la realización del Informe sobre el Problema de las Drogas en las Américas. “El análisis y los escenarios desarrollados en ese Informe han abierto un debate postergado por varias décadas y han constituido, gracias a su apoyo y el de los demás líderes del continente, un aporte indudable para la salud pública y la paz social en nuestro hemisferio”, concluyó.

Por su parte, el Presidente Juan Manuel Santos abrió su discurso recordando la relevancia que la OEA tiene para su país, considerada “un foro de gran importancia, que fue creado en nuestra capital”. Al destacar las labores que realiza la OEA, resaltó el papel que la institución desempeña como observadora y verificadora de procesos electorales, y la invitó públicamente a observar las elecciones generales de 2014. “Desde el año 2002, la OEA ha jugado un papel muy importante en la observación de elecciones en Colombia y esperamos que esté presente en las elecciones del próximo año, ya que ésta es una de las muchas actividades importantes de la OEA, la de garantizar la transparencia en nuestros sistemas democráticos, una transparencia que otorga legitimidad, que es tal vez el activo más importante que puede tener cualquier democracia”.

Al referirse a la Misión de Apoyo al Proceso de Paz (MAPP/OEA), el mandatario colombiano recordó como desde hace 9 años la OEA “acompaña y apoya a las comunidades víctimas del conflicto y al proceso iniciado para ir cicatrizando heridas y para restituirle las tierras a los campesinos que han sido desplazados por la violencia”.

Coincidiendo con la visión del máximo representante de la Organización hemisférica, el Presidente Santos destacó la relevancia de las Sexta Cumbre de las Américas y el Informe elaborado por la OEA bajo la dirección del Secretario General Insulza. “Se trata de una iniciativa muy importante, porque prácticamente todos los países que pertenecen a la OEA han sido víctimas del flagelo del narcotráfico y, principalmente, porque si hay un país que ha sido golpeado por el narcotráfico en todas sus facetas ha sido Colombia”, afirmó. A pesar de que su país considera haber dado una lucha exitosa, continuó, “a veces parece que estuviéramos en una bicicleta estática: avanzamos, pedaleamos y luchamos, pero miramos a lado y lado y notamos que la situación sigue igual, el negocio continua y la criminalidad persiste, de ahí surge la iniciativa de hacer una reflexión colectiva en este tema que a todos nos afecta”.

El Jefe de Estado colombiano comentó que el análisis del problema de las drogas debe mirarse “con ojos amplios, sin prejuicios, con información verdadera objetiva, ya que es un tema que genera todo tipo de sensibilidades y prejuicios”, y reiteró su llamado a usar como base el estudio realizado por la OEA “para avanzar en una discusión productiva, proactiva y propositiva, que le permita al mundo decidir si lo que estamos haciendo después de 40 años de haberle declarado la guerra a las drogas lo estamos haciendo bien o podríamos adoptar otros caminos u otras posiciones que sean más efectivas contra este flagelo”. “Este es uno de los temas que la OEA no debe perder como bandera, y que debe continuar con la iniciativa y con la toma de posiciones para lograr una mayor efectividad”, insistió.

El Presidente Santos compartió con el Consejo Permanente algunos de los avances económicos y sociales que Colombia ha alcanzado en años recientes, pero agregó que el desarrollo podía haber sido mayor sin “un cuello de botella que no nos ha permitido realizar nuestro verdadero potencial, que es el conflicto armado que venimos viviendo los colombianos desde hace medio siglo”. Dicho conflicto, continuó, ha desgarrado la fibra social “abriendo cicatrices, estimulando odios y venganzas y dándole a la sociedad colombiana una especie de inmunidad ante la violencia”. Es en ese contexto, explicó, en el que fueron iniciadas las negociaciones con las FARC, que a su juicio “han dado resultados sin precedentes, logrando acuerdos en puntos como el desarrollo rural y los posibles canales para la participación política de los diferentes grupos que han estado marginados de la democracia”.

Ese proceso, dijo el líder colombiano, presenta numerosos retos y barreras, por lo que es necesario analizarlo y valorarlo en su integridad. “Cuando hayamos finalizado la negociación se la presentaremos a la comunidad nacional e internacional para que los colombianos puedan decir si lo aceptan o no, y ahí es cuando realmente se pueden valorar los acuerdos alcanzados”, aseguró, e insistió en la importancia de continuar contando con el apoyo y acompañamiento de la comunidad internacional.

“Hemos avanzado hacia una democracia más completa y si podemos quitar del medio ese conflicto que tanto nos ha debilitado, el efecto no solamente sobre Colombia, sino sobre toda la región, va a ser muy positivo”, dijo, y agradeció al Secretario General y a todos los Países Miembros el apoyo que ha recibido Colombia por parte de la institución. “Tenemos mucho camino por recorrer, si logramos la paz, si logramos reconciliar a los colombianos en un proceso complejo en donde hay que cicatrizar demasiadas heridas, nuestro país y toda la región van a estar beneficiados”, insistió. El punto de destino, concluyó, es “una Colombia y una región en paz y próspera para todos”.

El Presidente del Consejo Permanente y Representante Permanente de Guyana, Embajador Bayney Karran, destacó cómo Colombia y sus líderes han realizado significativos aportes a la Organización Hemisférica a lo largo de su historia, y al tiempo que resaltó los programas y el apoyo que la misma ha brindado al país desde su creación. “En muchas ocasiones, su país también se ha beneficiado de varios programas apoyo especializado y asesoramiento de la OEA, entre otros, en las áreas de promoción de la paz, procesos democráticos, derechos humanos, seguridad y desarrollo humano, los cuales han contribuido a los esfuerzos de Colombia por preservar su Estado de derecho en su camino hacia el desarrollo”, afirmó. “La relación entre Colombia y la OEA es un perfecto ejemplo de cooperación interamericana, un caso evidente de lo que la OEA es y un testimonio de lo que nuestros Estados Miembros quieren que esta institución sea y haga por nuestra región”, añadió el Embajador Karran.

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Referencia: C-467/13