Las Américas es una de las regiones más propensas a los desastres en el mundo y, en los últimos años, el cambio climático ha provocado un aumento en la frecuencia y magnitud de los desastres naturales, incluidos inundaciones, huracanes, incendios forestales y sequías. Estos desastres naturales seguirán teniendo graves consecuencias en los medios de subsistencia, la infraestructura y las economías de los países del hemisferio occidental. La Organización de los Estados Americanos (OEA) considera este tema de máxima prioridad y ha adoptado una visión multilateral de prevención, mitigación y respuesta a través de herramientas, entidades e instrumentos y recursos que coadyuven a la recuperación eficaz y eficiente de desastres en las Américas. A través de su amplia experiencia técnica y su poder de convocatoria único, la OEA desempeña un papel importante en el desarrollo de las capacidades de preparación y respuesta ante desastres y en la facilitación de la respuesta internacional ante desastres.