Contexto


CIDH EXPRESA PREOCUPACIÓN POR ESTADO DE DERECHO EN LA REGION

  12 de marzo de 2004

La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) expresó hoy su preocupación por el debilitamiento del Estado de Derecho en algunos países de la región, así como la falta de vigencia efectiva de los derechos económicos, sociales y culturales. Reiteró, además, su preocupación por la vulnerabilidad de los defensores de derechos humanos en las Américas. La CIDH está integrada por José Zalaquett, Presidente; Clare K. Roberts, Primer Vicepresidente; y Susana Villarán, Segunda Vicepresidenta; y los Comisionados Evelio Fernández Arévalos, Freddy Gutiérrez, Florentín Meléndez y Paulo Sergio Pinheiro. El Secretario Ejecutivo de la CIDH es el Dr. Santiago A. Canton.

Al concluir el 119º período ordinario de sesiones de la Comisión, el Presidente de la CIDH, José Zalaquett, hizo referencia particular a la situación en Bolivia, Colombia, Cuba, Haití, y Venezuela:

La CIDH recibió información sobre la visita de su Secretario Ejecutivo a Bolivia, que tuvo lugar del 16 al 20 de febrero pasado. La visita se realizó en respuesta a una invitación del Gobierno boliviano y a una Resolución del Congreso Nacional que recomendó al Poder Ejecutivo “solicitar la presencia de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos de la Organización de los Estados Americanos con el objeto de coadyuvar en los procesos de investigación” sobre los graves hechos suscitados durante octubre de 2003 en que perdieron la vida aproximadamente 56 personas. Durante las audiencias, tanto la representación del Estado boliviano como los integrantes de la sociedad civil expresaron interés en que la CIDH realizara una visita in loco a Bolivia. La CIDH consideró dichas invitaciones e instruyó a su Secretaría Ejecutiva que iniciara las preparaciones correspondientes.

Respecto a Colombia, la CIDH recibió información sobre el impacto de la violencia derivada del conflicto armado sobre grupos vulnerables, defensores de derechos humanos y periodistas; y sobre el impulso de medidas legislativas, cuya implementación puede afectar el goce de derechos fundamentales, la limitación del recurso de tutela, y las discusiones sobre el recorte de facultades de la Corte Constitucional. En respuesta a una invitación formulada por el Consejo Permanente de la OEA, la CIDH además analizó las posibles modalidades de proporcionar asesoría a la Misión de Apoyo al Proceso de Paz en Colombia (MAPP/OEA). Durante sus sesiones, la CIDH decidió colaborar con la Misión MAPP/OEA en el marco de sus funciones de promover y proteger los derechos humanos en el hemisferio y, en particular, en Colombia. La CIDH hará llegar al Consejo Permanente un documento en el que explicará las posibles modalidades de su participación, así como los recursos necesarios para tal efecto.

La grave situación imperante en Cuba no ha variado, según información recibida por la CIDH, debido a la violación generalizada de las libertades públicas, particularmente el derecho a la libertad de expresión, y a la represión sistemática contra disidentes y periodistas independientes. La CIDH proseguirá el análisis de la situación general de los derechos humanos en dicho país, no solamente en sus informes de carácter general, sino también en los casos y peticiones individuales, y mediante el mecanismo de medidas cautelares.
Respecto a Haití, la CIDH continúa profundamente preocupada ante el estado de los derechos humanos durante la crisis actual. La CIDH recibió información diariamente acerca de numerosas ejecuciones y otras violaciones de derechos humanos. La CIDH insiste en que los derechos humanos de todas las personas deben respetarse en el proceso de restablecimiento la institucionalidad democrática en Haití. Los violadores de derechos humanos deben ser investigados, acusados y sancionados. Igualmente, la CIDH reitera su llamado a todas las partes en el sentido de asegurar que el suministro de ayuda humanitaria no resulte afectado. En este momento de crisis en Haití, la CIDH tiene particularmente en cuenta la condición de los niños, mujeres y otros grupos vulnerables. La CIDH seguirá observando de cerca la situación y espera que en breve se restablezca plenamente la legalidad y la institucionalidad democrática, conforme a lo prescrito por la Carta Democrática y la Convención Americana sobre Derechos Humanos.

Sobre Venezuela, la CIDH recibió información de los graves hechos de violencia ocurridos en las manifestaciones llevadas a cabo en desde el 27 de febrero al 1º de marzo de 2004 que dejaron como saldo por lo menos 8 muertos y 21 heridos, además de numerosas detenciones. Sobre esta situación particular, la CIDH reitera su llamado a la pacificación y a la preservación de la democracia y el Estado de Derecho en los términos de la Convención Americana y de la Carta Democrática Interamericana, ya que únicamente a través del diálogo y del respeto al sistema democrático, se podrá encontrar respuesta a la difícil situación que atraviesa el pueblo venezolano. Asimismo, la CIDH recibió información acerca de la proliferación de grupos parapoliciales que actúan al margen de la ley en varios estados de Venezuela; la impunidad que rodea las investigaciones de casos relacionados a violaciones de derechos humanos; y la fragilidad del sistema judicial ocasionada, en parte, por el hecho de que un 80% de los jueces tienen carácter provisional. Finalmente, la CIDH recibió información sobre la situación de pueblos indígenas en zonas mineras en el Sur de Venezuela. La CIDH hará público su informe sobre la situación de los derechos humanos en Venezuela el 18 de marzo de 2004.

La CIDH considera inaceptables las acusaciones de parcialidad manifiesta por medio de las cuales el Gobierno venezolano pretende cuestionar las actuaciones de su Secretario Ejecutivo con relación a ese país. La pretendida recusación del Dr. Canton formulada por el Gobierno venezolano carece de todo fundamento y, asimismo, de sustento jurídico. La CIDH manifiesta su confianza en las altas calidades morales y profesionales puestas de manifiesto por el Dr. Santiago A. Canton en el desempeño de sus funciones.

Por otra parte, la CIDH manifestó su preocupación por recientes señalamientos de altas autoridades de algunos Estados que descalifican la labor de organizaciones dedicadas a la defensa de los derechos humanos. La experiencia de la CIDH indica que las expresiones oficiales que cuestionan el trabajo de defensa de los derechos humanos pueden generar un grave riesgo para la vida, la integridad personal y la labor de activistas y defensores de derechos humanos.

Washington, D.C., 12 de marzo de 2004

Referencia: CIDH-08