Excelentísimo Señor Presidente de la República de Nicaragua Daniel Ortega Saavedra, Señora. Presidente Manuel Zelaya, Elías Saca, miembros de la mesa de honor, distinguidas autoridades, señoras y señores.
Hoy la Corte Centroamericana de Justicia, hoy la primera Corte Internacional del mundo celebra 100 años de vida, 100 años de su fundación en esta linda ciudad de Managua, Nicaragua.
Quiero Señor presidente reiterar mis saludos de parte de nuestra organización y de todos los Estados Americanos representados por mí.
El continente americano siempre ha sido un continente de derechos internacional. En su elaboración, aplicación y difusión en el ámbito universal. Las ideas expresadas en sus primeras convenciones, sus propuestas de solución pacifica de controversias, sus antecedentes en materia de tribunales tanto arbítrales como permanentes, son prueba de ello e impactaron el derecho internacional universal en los tiempos de su codificación.
También es prueba de ello el transcurrir del siglo XX en las relaciones de interamericanas: el continente no ha conocido guerras internacionales, no ha sabido de invasiones, ni cambios de fronteras por la fuerza provocado por un Estado Americano a expensas de sus vecinos. El mapa de América ha permanecido casi sin variaciones a lo largo de todo el siglo transcurrido, cosa que, lamentablemente, no ocurrió en las otras regiones del planeta. Falló y mucho, el derecho interno americano, pero no el derecho internacional interamericano. Todos los conflictos entre sus miembros fueron resueltos por algunos de los medios pacíficos de solución de controversias; la negociación de las partes, la mediación del recurso al arbitraje o a la Corte Internacional de Justicia y los que aún están pendientes tomarán algunos de esos caminos.
Este plano sería el siguiente para nuestra América, tenemos muchos problemas muchos conflictos, las guerras entre nosotros en el último siglo han sido uno de los problemas por desgracia en las demás regiones del mundo, por lo tanto hablar en nombre de la OEA, no es solo hablar desde la Secretaría de una Organización que nace el 1948 sino de una institución que comienza en su vida en 1889, cuando se constituyó la primera conferencia americana, con la constitución de la Secretaría de la Unión Panamericana y con la elaboraron de los primeros acuerdos interamericanos, cuya finalidad era asegurar la paz y la cooperación en el continente.
En la preocupación del sistema interamericano, desde un inicio estuvo prohibir el uso de la fuerza en las relaciones internacionales y dotar al sistema de los medios que permitiesen una solución pacifica de las controversias. Primero, y ya en 1890, el recurso al arbitraje, la limitación de armamentos, la condena a la conquista; luego los primeros tratados para la solución de controversia, lo que culminaría con la adopción en 1948, del Pacto de Bogotá sobre solución pacifica de controversias, al mismo momento que se establecía la Organización de Estados Americanos.
En el plano universal es notable la participación de los Estados miembros desde el Sistema Interamericano en la Segunda Conferencia de La Haya de 1907, donde la convención de Drago-Porter (un latinoamericano y un norteamericano) puso límites a los abusos en materia de uso de la fuerza y significó un primer paso a la prohibición de la fuerza en el ámbito universal.
También fue notable la influencia de los Estados miembros del sistema en la constitución de tribunales arbítrales y en la creación de instancias jurisdiccionales permanentes, y a través de ellos de una importante jurisprudencia en temas tales como responsabilidad internacional, reclamaciones por deudas, presas marítimas y delimitaciones fronterizas.
No puedo dejar de recordar tampoco, la influencia notable de los juristas americanos primero de la Corte Permanente de Justicia y luego su sucesora, La Corte Internacional de Justicia que fue presidida en distintos momentos por juristas tan ilustres de nuestros países miembros como: Guerrero, Bustamantes.
Hoy contamos en la región con una corte en materia de protección de los Derechos Humanos con sede en Costa Rica, establecida en la constitución Americana en 1969; varias instancias permanentes en materia de solución de controversias en los procesos de integración: Centroamérica, países andinos, entre los países del MERCOSUR y más recientemente en la muy importante constitución de la Corte de los países del Caribe anglosajón la que va más allá de una corte internacional de integración para ser su verdadera corte suprema regional.
También nuestro derecho y nuestros juristas han marcado el desarrollo del derecho del mar, que hoy cuenta con su propio tribunal en el ámbito universal, así como han tenido activa participación en la creación del tribunal penal internacional.
El desafío del derecho interamericano entonces ha estado muy presente en todas la actividades políticas de nuestras naciones, y el desafío en general no es exclusivamente el de elaborar normas; es el de asegurar su buen cumplimiento.
Hoy día, nuestra tarea central, tal vez sea a eso, contribuir al cumplimiento del derecho internacional que hemos elaborado a través de más de un siglo, colaborar con los Estados que aún mantienen diferencias para velar por su solución pacifica, en un espíritu de colaboración y entendimiento, eso lo hemos venido haciendo y estamos orgullosos de eso, lo continuaremos haciendo, facilitando el diálogo y promoviendo la asistencia técnica necesaria para ello.
También debemos abrir mecanismos para que nos permita la cooperación entre Estados para asegurar el seguimiento y el cumplimiento de las cooperaciones internacionales que hemos sostenidos en los últimos años. Hoy reiteramos nuestro compromiso.
Señores Magistrados de la Corte Centroamericana de Justicia: su deber es asegurar el derecho internacional, asegurar que se pueda contar con las normas más adecuadas y con los mecanismos que luego aseguren el respeto de sus obligaciones y de los fallos en el ámbito internacional y en el ámbito interno de los Estados. El Sistema Interamericano se ha comprometido a ellos desde sus inicios.
Hoy es un día de festejo y es un día para renovar nuestra convicción de un derecho internacional basado en el respeto a la justicia, a la igualdad jurídica y a la cooperación.
Muchas gracias.