Muchas gracias Señor Presidente Leonel Fernández, Presidente Preval al Primer Ministro Bellerive, Presidente Clinton señores Vicepresidentes, amigas y amigos. En primer lugar, quiero agradecer al Presidente Fernández y al gobierno y pueblo de Republica Dominicana por la organización brillante de esta reunión y además por la inmensa solidaridad demostrada desde los primeros días con la causa de Haití.
No podemos olvidar que la primera reunión que tuvimos para programar tanto los planes de la emergencia como el futuro de Haití, tuvo lugar en este país a solo 6 días de ocurrido el terremoto. Luego nos hemos reunido en Montreal, en marzo con la diáspora en Washington en la sede de la OEA, el 31 de marzo en Nueva York, y creo que hoy tenemos un cuadro claro de lo que tenemos que hacer. He dicho ayer que esta reunión no es para pasar revista a lo que ha ocurrido sino para tomar el programa y convertirlo en acción. Estamos en la fase de ejecución de los programas que hemos prometido, y por eso me ha entusiasmado mucho la reunión de ayer con el Presidente Clinton y el Primer Ministro Jean Max Bellerive, de la Comisión Interina de Reconstrucción de Haití, porque ahí se hablo de cuestiones concretas: se hablo de los pilares sobre los cuales se va a trabajar, de los proyectos que va a llevar adelante cada uno, y de los fondos con los cuales se va a contar. Eso es lo que tenemos que hacer, eso es lo que espera el pueblo haitiano, y espero que podamos hacerlo sobrellevando los problemas de la emergencia que podrían agravarse en este periodo de huracanes.
La Organización de Estados Americanos que ha estado desde el comienzo trabajando con el gobierno de Haití y con el resto de la comunidad internacional y especialmente con el sistema interamericano -con el BID, PAHO- cumplirá con sus tareas en el pilar institucional, en primer lugar con el fortalecimiento del proceso electoral. Compartimos la idea que hay cumplir el calendario electoral, estamos trabajando bien con Naciones Unidas para las próximas elecciones presidenciales, legislativas y locales, y vamos a apoyar al Consejo Electoral Provisional en la actualización del padrón electoral, en la organización de la campana de educación cívica, en el funcionamiento adecuado de centros de fabulación, y en el uso de programas electorales computarizados,
Creo que es importante cumplir con la voluntad del Presidente Preval, que ha dicho que quiere concluir su periodo y se quiere ir con el corazón tranquilo, estamos seguiros de eso por lo mucho que ha hecho por su pueblo. Estamos trabajando en la modernización del registro civil y en los sistemas de identificación; esperamos poder entregar este año documentos de identidad a 4.3 millones de haitianos adultos, queremos ampliar el registro civil a los niños y reemplazar documentos de identidad a las personas que los han perdido durante el terremoto.
Desde el año 2006, la OEA ha brindado asistencia técnica y capacitación al Consejo Electoral Provisional (CEP), con lo cual ha contribuido al desarrollo de capacidades y ha permitido que la población tenga la certeza de que el proceso electoral es confiable e imparcial. Antes del terremoto del 12 de enero de 2010, la OEA se encontraba preparando una Misión de Observación Electoral para las elecciones legislativas que estaban programadas para el 28 de febrero de este mismo año. Sin embargo, las elecciones debieron ser pospuestas y surgen ahora nuevos desafíos, como lo es el ubicar a un número significativo de votantes que han sido desplazados o que han fallecido.
Será pues decisivo que se brinde apoyo al proceso electoral y a la celebración de comicios libres, justos y confiables con el fin de mantener la estabilidad y el gobierno democrático en un entorno desafiante, y para garantizar la legitimidad del Gobierno de Haití cuando el Presidente René Préval deje su cargo a principios de 2011.
La OEA ha estado colaborando, desde 2005, con el Ministerio de Justicia y Seguridad Pública y con el Ministerio de Cultura y Comunicación de Haití para modernizar el registro civil y los sistemas de identificación. La fase en curso del programa de seis años, iniciado en 2008, pretende establecer un registro civil moderno y confiable, capaz de otorgar a todos los haitianos una identidad civil mediante un número de identificación único que habrán de utilizar desde su nacimiento. Gracias a esta identidad civil los ciudadanos podrán ejercer cabalmente sus derechos civiles, políticos, económicos y sociales; y el Estado, por su parte, tendrá la información necesaria para elaborar planes de desarrollo y fortalecer su gestión democrática.
Con el apoyo de la Agencia Canadiense de Desarrollo Internacional (ACDI), el programa de registro civil de la OEA ha logrado empadronar al 92% de la población adulta, ha distribuido documentos de identidad a 4,3 millones de haitianos adultos y ha establecido 141 sucursales de la Oficina Nacional de Identificación en todo el país. La base de datos electrónica que se ha desarrollado con este programa se encuentra plenamente en servicio, a pesar del terremoto, y resulta ser ahora una herramienta invaluable para el Gobierno de Haití y la comunidad internacional en su afán de elaborar planes de desarrollo social y económico.
La OEA pretende, por tanto, seguir adelante con este programa y promover aún más el proceso de modernización mediante:
. La ampliación del uso del registro civil también para los niños, pues el programa sólo abarca actualmente a los adultos;
. La capacitación del personal de la Oficina Nacional de Identificación;
- El reemplazo de documentos de identidad a las personas que los hayan perdido durante el terremoto;
- La colaboración con las autoridades haitianas pertinentes para actualizar las listas de registro civil considerando a los fallecidos;
-La aceleración del proceso de digitalización de la información del registro civil heredada de los Archivos Nacionales, y la restauración y mejora de la infraestructura y logística del registro civil.
La continuación del programa de registro civil es decisiva pues con ello se ayudará al Gobierno de Haití a tener información actualizada y precisa sobre la población que, en un gran porcentaje, sigue sin ser contada.
Esperamos iniciar pronto, con la colaboración de algunos integrantes de la comunidad internacional, la modernización del sistema catastral y de infraestructura de tenencia de la tierra. Menos de un 5 por ciento de los terrenos están documentados, catastrados, y al no tener datos digitalizados, mientras haya solo costumbres tradicionales, no hay posibilidad de atraer inversiones extranjeras. Creemos que ese esfuerzo es importante también para recuperación de empresas y por esa razón creemos que debemos acometer esta tarea.
Dados los avances significativos en el registro civil, el establecimiento de un sistema catastral sólido y moderno en Haití será un instrumento importante y complementario para el desarrollo socioeconómico del país.
Como registro público, un plano catastral tendrá información sobre los linderos de las propiedades, detalles sobre el terreno y datos sobre sus propietarios. Un plano catastral moderno es esencial para:
Asegurar la tenencia de la tierra; contar con una base justa y transparente para el cálculo de impuestos por tenencia de la tierra; apoyar el desarrollo y gestión de la tierra; tener las bases necesarias para estimular las inversiones y el desarrollo económico, y reducir los conflictos relacionados con la propiedad de la tierra.
Luego de una serie de consultas con las autoridades de Haití, la OEA elaboró un programa de siete años para modernizar el sistema catastral y la infraestructura de los derechos de propiedad de la tierra. Este programa tiene como objetivo apoyar los esfuerzos de reconstrucción con toda la información necesaria relacionada con la tierra, en particular con las características geodésicas y los derechos fiscales y de propiedad; modernizar el marco regulatorio con la creación de una nueva estructura institucional para mejorar la seguridad, eficiencia, transparencia y aprovechamiento de los derechos de propiedad de la tierra en el desarrollo de Haití; y registrar todas las propiedades en Haití garantizando que todos los ciudadanos conserven sus derechos.
La modernización del catastro es un elemento esencial para la reconstrucción del país y para los esfuerzos del Gobierno por reubicar a más de un millón de personas que perdieron sus hogares en el terremoto. Es también un apoyo para la recuperación de las empresas destruidas y el desarrollo de proyectos de infraestructura, como carreteras, puertos, sistemas de drenaje y servicios públicos, entre otros. Todos estos esfuerzos requieren datos catastrales precisos que permitan la plena identificación de los propietarios.
Aunque este tipo de tragedias son dolorosas y cambian el destino de los países -lo dice quien viene de una tierra que sufre estas tragedias- al mismo tiempo sirven para fortalecer a los pueblos. He estado en Puerto Príncipe y he visto a la gente, a cada uno poniendo su esfuerzo y quiero decirles que ustedes pueden contar con que la comunidad internacional. La Organización de Estados Americanos los seguirá acompañando en este tipo de esfuerzos, que nos hará a todos, mejores.
Muchas gracias