Libertad de Expresión

Comunicado de Prensa R95/11

COMUNICADO DE PRENSA

R95/11

RELATORIA ESPECIAL PARA LA LIBERTAD DE EXPRESION

CONDENA ASESINATO DE PERIODISTA EN SINALOA, MEXICO

 

 

Washington D.C., 26 de agosto de 2011. La Relatoría Especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos condena el secuestro y asesinato del periodista Humberto Millán, ocurrido en Sinaloa, México, y solicita a las autoridades una investigación exhaustiva que tome en cuenta la posibilidad de que el crimen haya sido motivado por el ejercicio del periodismo.

 

De acuerdo con la información recibida, Humberto Millán fue secuestrado por varios hombres armados en la mañana del 24 de agosto, en Culiacán, Sinaloa, cuando se dirigía a la emisora Radio Fórmula, donde conducía un programa periodístico. En la mañana del 25 de agosto, el periodista fue encontrado muerto, con una herida de bala en la cabeza.

 

Según lo informado, además de su trabajo en la radio, Humberto Millán dirigía el periódico digital A Discusión, donde se especializaba en información política local y nacional. El periodista, con más de 30 años de experiencia en medios de comunicación, era conocido por sus comentarios críticos y denuncias acerca de presuntos actos de corrupción política.

 

La Relatoría Especial tuvo conocimiento del establecimiento de una comisión de investigación para este caso, encabezada por la Procuraduría de Justicia del Estado de Sinaloa, en colaboración con la Procuraduría General de la República, e insta a las autoridades a hacer un análisis exhaustivo de las circunstancias del crimen y del trabajo periodístico de la víctima, como posible móvil del homicidio

 

Este es el sexto homicidio cometido contra comunicadores en México en 2011, que podrían estar relacionados con el ejercicio del periodismo. En 2011 han sido reportados la desaparición y el posterior asesinato de  Noel López Olguín, el 8 de marzo en Veracruz; los homicidios de  Luis Ruiz Carrillo y José Luis Cerda Meléndez, el 25 de marzo en Monterrey; la muerte de  Miguel Ángel López Velasco, el 20 de junio en Veracruz y el asesinato de  Yolanda Ordaz, el 26 de julio en Boca del Río, Veracruz. Además, el 7 de junio desapareció en Guerrero el periodista Marco Antonio López Ortiz, cuyo paradero todavía es desconocido.   En otros ataques contra medios de comunicación murieron la repartidora de periódicos, Maribel Hernández, el 31 de enero en Ciudad Juárez; y el ingeniero  Rodolfo Ochoa Moreno, el 9 de febrero en Coahuila.

 

La Relatoría Especial reitera su preocupación por los crímenes reportados y hace un llamado urgente a las autoridades para que fortalezcan a la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos Cometidos Contra la Libertad de Expresión, trasladen a la justicia federal las investigaciones de los crímenes contra comunicadores en aquellos casos que se requiera, e implementen adecuadamente los mecanismos de seguridad necesarios para proteger efectivamente la vida e integridad de las y los periodistas amenazados. Además, la Relatoría Especial insiste en que para impedir la impunidad de los crímenes cometidos así como la repetición de este tipo de hechos es imprescindible identificar a todos los responsables de los crímenes, juzgarlos, sancionarlos y adoptar medidas de reparación justas para los familiares de las víctimas.

 

El principio 9 de la Declaración de Principios sobre Libertad de Expresión de la CIDH señala: "El asesinato, secuestro, intimidación, amenaza a los comunicadores sociales, así como la destrucción material de los medios de comunicación, viola los derechos fundamentales de las personas y coarta severamente la libertad de expresión. Es deber de los Estados prevenir e investigar estos hechos, sancionar a sus autores y asegurar a las víctimas una reparación adecuada".