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La Comisión Interamericana condena atentado contra otro miembro de la familia Barrios en Venezuela
14 de enero de 2011
Washington, D.C. – La Comisión
Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) deplora el atentado sufrido por
Néstor Caudi Barrios tras reiteradas amenazas de la policía del Estado
Aragua en Venezuela, sin que el Estado haya adoptado medidas para protegerlo
a pesar de ser beneficiario de medidas provisionales dictadas por la Corte
Interamericana. Este hecho se enmarca en el patrón de persecución y
desprotección en que se encuentra la Familia Barrios en el Estado Aragua,
Venezuela, situación que ha cobrado la vida de 6 de sus miembros.
Según lo informado a la Comisión Interamericana, el pasado 2 de enero de
2011, el joven Néstor Caudi Barrios se encontraba en su moto frente a la
vivienda de su tía Eloisa Barrios en el sector Las Casitas, pueblo de
Guanayen, Estado Aragua, cuando fue interceptado por dos motorizados
vestidos de civil y con casco, quienes procedieron a dispararle en múltiples
oportunidades. La información disponible indica que no le robaron ninguna
pertenencia a Néstor Caudi Barrios quien se encontraría actualmente en un
hospital.
Entre 1998 y 2010 fueron asesinados seis miembros de la familia Barrios: los
dos hermanos de Néstor Caudi, Rigoberto, a los 15 años, y Wilmer José
Flores; su primo Oscar, a los 22 años; y sus tíos Benito, Narciso y Luis.
Benito y Narciso Barrios fueron ejecutados extrajudicialmente por la policía
de Aragua, y la CIDH determinó en el procesamiento de este caso que hay
elementos suficientes para concluir que lo mismo ocurrió con Luis, Rigoberto
y Oscar Barrios.
La Comisión y la Corte Interamericanas de Derechos Humanos le han dado
seguimiento a esta situación mediante todas las acciones correspondientes
(solicitudes de información, medidas cautelares, medidas provisionales,
informes de admisibilidad y de fondo de la Comisión y envío del caso a la
Corte IDH), pero el Estado de Venezuela no adoptó las medidas necesarias
para proteger la vida de los miembros de esta familia, que continúa siendo
víctima de asesinatos, detenciones, allanamientos, amenazas y hostigamiento.
El Estado tampoco ha dispuesto que se realicen investigaciones efectivas
sobre estos crímenes, que permanecen en la impunidad.
Néstor Caudi Barrios fue testigo presencial de la ejecución extrajudicial de
su tío Narciso Barrios perpetrada el 11 de diciembre de 2003 por
funcionarios de la policía del Estado Aragua. Desde ese momento ha recibido
múltiples amenazas de muerte por funcionarios policiales, especialmente
cuando las investigaciones se reactivan. Las amenazas de muerte fueron
denunciadas en reiteradas oportunidades ante las autoridades venezolanas
quienes no dispusieron medida de protección alguna en su favor. Esta
situación motivó que Néstor Caudi Barrios se desplazara de su lugar de
residencia para proteger su vida e integridad personal.
Recientemente la familia Barrios habría denunciado ante las autoridades
internas la continuidad del hostigamiento por parte de funcionarios de la
policía de Aragua. La información disponible indica que el 29 de noviembre
de 2010 varios miembros de la familia Barrios asistieron a una conmemoración
religiosa por el aniversario de la muerte de Oscar José Barrios, viendo
rondar cerca de la casa de la señora Eloisa Barrios y en horas de la noche a
un funcionario policial que ha sido denunciado como presunto responsable de
diversos hechos de violencia contra la familia Barrios. Ante esta situación,
el 17 de diciembre de 2010 el representante legal de la familia habría
interpuesto una denuncia en la Unidad de Atención a la Víctima, a fin de
verificar las labores que cumplía dicho funcionario. Según lo informado a la
CIDH, esta denuncia habría sido archivada.
La Comisión Interamericana expresa su profunda preocupación por la situación
de desprotección y vulnerabilidad en la que permanecen los miembros de la
familia Barrios. Asimismo, la CIDH condena las múltiples omisiones del
Estado venezolano en disponer medidas efectivas de protección a pesar de que
por lo menos desde el año 2004 ha tenido pleno conocimiento de las
ejecuciones extrajudiciales que comenzaron a perpetrarse contra la familia
Barrios.
La CIDH recuerda que es obligación del Estado investigar de oficio hechos de
esta naturaleza y sancionar a los responsables. Asimismo, la Comisión
reitera una vez más su llamado al Estado de Venezuela a adoptar en forma
inmediata y urgente todas las medidas necesarias a fin de garantizar el
derecho a la vida, la integridad y la seguridad de los miembros
sobrevivientes de esta familia.
La CIDH es un órgano principal y autónomo de la Organización de los Estados
Americanos (OEA), cuyo mandato surge de la Carta de la OEA y de la
Convención Americana sobre Derechos Humanos. La Comisión está integrada por
siete miembros independientes que se desempeñan en forma personal, que no
representan a ningún país en particular y que son elegidos por la Asamblea
General de la OEA.
No. 1/11