Libertad de Expresión

Comunicado de Prensa 49/01

PREOCUPACIÓN DE LA RELATORÍA PARA LA LIBERTAD DE EXPRESIÓN DE LA CIDH POR LOS ASESINATOS A PERIODISTAS EN COLOMBIA  

            La Relatoría realizó una visita en Colombia donde recibió información sobre la grave situación en la que se encuentran numerosos periodistas que trabajan en la cobertura del conflicto armado.  La Relatoría para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de la Organización de Estados Americanos manifiesta su seria preocupación por los asesinatos, actos de violencia e intimidaciones de los que son víctimas un gran número de periodistas.

La Relatoría visitó Colombia con el fin de evaluar la situación de los periodistas en el marco de la visita de la CIDH que tuvo lugar desde el 7 hasta el 13 de diciembre de 2001 por invitación del Gobierno del Presidente Andrés Pastrana Arango. 

Durante su estadía en Colombia, la Relatoría cumplió una agenda de actividades en las ciudades de Bogotá y Medellín. Dicha agenda incluyó reuniones con organismos del Estado que desarrollan programas de protección y defensa a periodistas, directores y editores de medios de comunicación, organizaciones independientes, y periodistas de las distintas regiones del país con el objetivo de analizar las condiciones en que se ejerce la profesión del periodista y el derecho a la información en Colombia. Los datos recabados serán procesados oportunamente y la Relatoría emitirá un informe detallando de los resultados de la visita.   

            La Relatoría reconoce el esfuerzo de las autoridades colombianas para garantizar el derecho a la libertad de expresión a través de la creación de mecanismos de protección de periodistas como es la Sub-unidad de Investigación de Asesinatos a Periodistas de la Unidad Nacional de Derechos Humanos de la Fiscalía General de la Nación y el Programa de Protección a Periodistas y Comunicadores Sociales del Ministerio del Interior. Estos mecanismos han permitido proteger la integridad personal de un importante número de periodistas colombianos.  

La Relatoría recibió información sobre el asesinato de aproximadamente diez periodistas ocurridos en el año 2001.   Según información recibida, más del 90% de los asesinatos ocurridos en los últimos años continúan impunes y, en algunos casos, aún no se han iniciado investigaciones para determinar tanto sus autores materiales como intelectuales. El alto grado de impunidad existente contribuye significativamente a la perpetuación de la violencia en contra de los periodistas. 

            La Relatoría realizó entrevistas en las ciudades de Bogotá y Medellín con más de 30 periodistas que trabajan en las regiones del país más afectadas por el conflicto armado. Los periodistas señalaron su preocupación por los asesinatos, agresiones físicas y psicológicas, secuestros, amenazas  y otros actos de hostigamiento de los que son víctimas tanto por parte de grupos armados disidentes como por grupos paramilitares. A este respecto, manifestaron la necesidad de que los actores del conflicto armado se abstengan de identificar a los periodistas como aliados de sus opositores. Asimismo, la Relatoría recibió información sobre la existencia de una estrategia por parte de grupos armados ilegales orientadas a silenciar a los periodistas de investigación por medio del asesinato, la intimidación o el desplazamiento forzado. 

La Relatoría condena los actos de violencia contra periodistas a la luz de lo establecido en el principio 9 de la Declaración de Principios sobre la Libertad de Expresión de la CIDH que señala:  “El asesinato, secuestro, intimidación, amenaza a los comunicadores sociales, así como la destrucción material de los medios de comunicación viola los derechos fundamentales de las personas y coarta severamente la libertad de expresión.  Es deber de los Estados prevenir e investigar estos hechos, sancionar a sus autores, y asegurar a las víctimas una reparación adecuada”.  

            En muchas regiones del país existen retenes establecidos por actores del conflicto armado que dificultan la circulación de los periodistas y medios de comunicación y los hace vulnerables a ataques y actos de hostigamiento. La Relatoría tomó conocimiento sobre casos que ilustran las condiciones en las que trabajan algunos periodistas, los cuales se detallan a continuación.  

            Los periodistas de los departamentos de Caquetá, Antioquia, Nariño, Bolívar y Valle del Cauca, trabajan bajo constantes actos de hostigamiento que en algunos casos los han llevado al exilio. Algunos de los asesinatos registrados en el 2001 ocurrieron en estas localidades. Según la información recibida, en algunos de estos departamentos, televisión, radio y medios de prensa escrita han dejado de informar sobre el conflicto armado por temor a las amenazas. La violencia contra la labor de los periodistas constituye no sólo una amenaza al ejercicio de la libertad de expresión sino también a su derecho al trabajo.   

En noviembre del año 2001 cuatro periodistas de Pasto, Nariño, fueron amenazados por los paramilitares y se vieron obligados a abandonar sus ciudades. La Relatoría para la Libertad de Expresión solicitó, a través de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, la adopción de medidas cautelares por parte del Estado colombiano en favor de Cristina Castro, Alfonso Pardo, Oscar Torres y Germán Arcos. Uno de los periodistas informó que las amenazas contra su vida se repitieron con posterioridad a la protección otorgada por las autoridades.  

La Relatoría se reunió asimismo con los periodistas Jineth Bedoya Lima y Hollman Morris Rincón que informaron sobre el seguimiento de las medidas cautelares otorgadas en su favor durante el año 2000. En el caso particular de Jineth Bedoya Lima, la Relatoría fue informada sobre la falta de avances en la investigación para identificar a los responsables del secuestro y violento ataque del que fue víctima en mayo del año 2000. 

Sin perjuicio del informe que será hecho público oportunamente y en la voluntad de colaborar para mejorar la situación de numerosos periodistas, la Relatoría desea realizar las siguientes recomendaciones:  

 La Relatoría solicita al Estado colombiano la adopción en forma inmediata de las medidas necesarias para asegurar  la  investigación seria e imparcial de los asesinatos y actos de violencia cometidos contra periodistas, con el fin de juzgar y sancionar a los responsables. 

 Varios periodistas señalaron la necesidad de que el Programa de Protección a Periodistas del Ministerio del Interior se extienda no sólo a comunicadores que cubren el conflicto armado sino también a aquellos que investigan otras áreas tales como administración de justicia o corrupción. Los responsables de este Programa manifestaron a la Relatoría su voluntad de hacer efectiva esta ampliación. A este respecto, recomienda al Estado colombiano que otorgue mayor presupuesto a los programas gubernamentales de defensa y protección de la libertad de expresión y que realice campañas de difusión.  

La Relatoría hace un llamado a todos los actores del conflicto armado para que permitan a los periodistas y medios de comunicación ejercer libremente su valiosa tarea de informar a la sociedad.    

La Relatoría desea destacar la necesidad de lograr una mayor cooperación entre los periodistas colombianos. Las experiencias recabadas en otros países han demostrado que la organización de periodistas en organismos de la sociedad civil destinados a proteger su integridad personal, expresarse libremente y asegurar el derecho a la información de todas las personas, ha contribuido significativamente en la mejora de las condiciones de seguridad para el ejercicio de la profesión.  

La Relatoría hace un pedido especial a los directores de los medios de comunicación para que proporcionen apoyo a las unidades de Paz y Derechos Humanos de los diarios y revistas colombianos. La labor de los periodistas que se desempeñan en estas áreas constituye sin duda un modelo ejemplar para gran parte de los medios de comunicación de otros países del hemisferio. La Relatoría considera fundamental que estos periodistas puedan continuar informando a la sociedad colombiana sobre la evolución del conflicto armado y la situación de los derechos humanos en Colombia. 

La Relatoría para la Libertad de Expresión agradece la cooperación y las facilidades provistas por el Gobierno de Colombia y las organizaciones no gubernamentales e instituciones de la sociedad civil en la preparación y realización de esta visita. Asimismo, la Relatoría extiende su agradecimiento a los representantes de la sociedad civil, los medios de comunicación y en especial a los periodistas por la importante información suministrada durante la visita.  

Por último, la Relatoría desea reconocer la extraordinaria valentía, dignidad y profesionalismo de numerosos periodistas colombianos quienes, a pesar de las serias amenazas dirigidas en contra de sus vidas, continúan ejerciendo su labor de informar en beneficio de toda la sociedad colombiana y de la comunidad internacional.  

Relatoría Especial para la Libertad de Expresión de la CIDH 
13 de diciembre de 2001 
Santafé de Bogotá, Colombia