Libertad de Expresión

Comunicado de Prensa 52/02

LA RELATORIA PARA LA LIBERTAD DE EXPRESION DE LA CIDH CONDENA GRAVE ATENTADO A PERIODISTA Y ATAQUE A UNA RADIO EN COLOMBIA 

La Relatoría para la Libertad de Expresión de la CIDH expresa su seria preocupación por los ataques al ejercicio de la libertad de expresión ocurridos en Colombia el 30 de enero del 2002. El periodista Orlando Sierra Hernández, subdirector del diario La Patria de Manizales, recibió tres disparos de bala en la cabeza en un atentado y se encuentra en grave estado. Por otra parte, en horas de la madrugada un coche bomba explotó en las instalaciones del noticiero nacional Caracol Televisión en Bogotá. El atentado causó serios daños materiales al medio de comunicación pero no hubo víctimas.  

El periodista escribía una columna de opinión en la cual expresaba críticas y denuncias relacionadas con el conflicto armado que se desarrolla en Colombia. En cuanto al ataque a Caracol, se desconocen los motivos como también sus responsables. Ningún grupo armado por el momento se ha adjudicado los atentados.  

La Relatoría condena ambos atentados los cuales constituyen serias violaciones a la libertad de expresión. La situación de los comunicadores sociales y medios de comunicación en Colombia es un tema de gran preocupación para la Relatoría y en esta oportunidad los hechos descritos revisten especial gravedad, ya que dichos atentados coinciden con el recrudecimiento del conflicto armado interno de las últimas semanas. Los atentados a periodistas y la destrucción material de los medios de comunicación son métodos que persiguen silenciar a la prensa crítica e independiente y constituye una de las formas más graves de atentar contra el derecho a la libertad de expresión. El principio 9 de la Declaración de Principios sobre Libertad de Expresión de la CIDH dice al respecto:  

“El asesinato, secuestro, intimidación, amenaza a los comunicadores sociales, así como la destrucción material de los medios de comunicación, viola los derechos fundamentales de las personas y coarta severamente la libertad de expresión. Es deber de los Estados prevenir e investigar estos hechos, sancionar a sus autores y asegurar a las víctimas una reparación adecuada.”  

La Relatoría solicita al Estado colombiano a que inicie una investigación seria e imparcial sobre ambos atentados y que juzgue y sancione a sus responsables. Asimismo, recuerda a dicho Estado que, tal como lo establece la Convención Americana sobre Derechos Humanos, es su deber garantizar un amplio ejercicio del derecho a la libertad de expresión de toda la sociedad. La libertad de expresión es esencial para el fortalecimiento del sistema democrático e indispensable para la formación de opinión pública, ambos elementos imprescindibles en momentos de crisis interna como la que vive Colombia.  

Relatoría Especial para la Libertad de Expresión  
31 de enero de 2002  
Washington, D.C.