RELE condena asesinato del periodista Alejandro Martínez Noguez y urge una investigación diligente y exhaustiva

12 de agosto de 2024

Washington, D.C. – La Relatoría Especial para la Libertad de Expresión (RELE) de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) condena el asesinato del periodista Alejandro Martínez Noguez, en Celaya, Guanajuato, México. Esta Oficina llama al Estado a investigarlo de manera diligente y exhaustiva, considerando su oficio como un posible móvil del crimen, y a sancionar a los responsables.

De acuerdo con reportes públicos, el 4 de agosto de 2024, el periodista Alejandro Martínez Noguez se trasladaba a bordo de una patrulla de regreso a Celaya, después de cubrir un evento noticioso en un municipio vecino, cuando sujetos armados dispararon contra el vehículo. A pesar de ser trasladado con vida a un hospital de Celaya, el periodista falleció mientras recibía atención médica. Además, dos policías que lo acompañaban resultaron heridos en el ataque, según informaron medios locales.

Alejandro Martínez Noguez publicaba en su página de Facebook, El Hijo del Llanero Solititito, noticias de interés, incluyendo temas políticos y deportivos. Es de destacar que el periodista contaba con un esquema de protección y medidas proporcionadas por el mecanismo federal debido a un intento de homicidio a finales de 2022 y otras agresiones previas.

Según pudo conocer la RELE, la Fiscalía General del estado de Guanajuato ha iniciado una investigación para esclarecer los hechos. Esta Oficina también reconoce los pronunciamientos del gobierno municipal de Celaya, condenando el crimen y en los que se compromete a dar seguimiento a la investigación de la Fiscalía “para que se conozcan las causas” y los responsables “sean llevados ante la justicia”.

Esta Oficina observa con preocupación que, en lo corrido de 2024, se ha registrado el asesinato de tres periodistas en el país: Roberto Figueroa, Víctor Morales y Alejandro Martínez Noguez, así como el asesinato del locutor de radio Martín Antonio Olivier Rodríguez.

El asesinato de periodistas y comunicadores constituye, además de una violación al derecho de la vida, el atentado más grave a la libertad de expresión y una forma de censura directa. De acuerdo con la Declaración de Principios sobre Libertad de Expresión, el asesinato, secuestro, intimidación y amenaza a periodistas “viola los derechos fundamentales de las personas y coarta severamente la libertad de expresión”. En consecuencia, es deber de los Estados prevenir e investigar estos hechos, sancionar a los responsables y garantizar una reparación adecuada a las víctimas.

La Oficina reitera que la obligación de los Estados de adoptar medidas para prevenir la violencia contra periodistas, trabajadores y trabajadoras de los medios de comunicación se acentúa “ante situaciones o zonas en las cuales existe o se ha detectado un riesgo especial para los periodistas trabajadores de medios de comunicación”.

En razón de los hechos expuestos, la Relatoría Especial urge a las autoridades mexicanas a llevar a cabo una investigación exhaustiva y a sancionar a los responsables directos e intelectuales, considerando la labor periodística como un posible móvil del crimen. Además, reitera su llamado a fortalecer y adoptar las medidas preventivas que aborden las causas profundas de la violencia y la impunidad de los crímenes contra periodistas en México, así como a reforzar las medidas de protección para las y los periodistas cuya vida o integridad esté en riesgo.

La Relatoría Especial para la Libertad de Expresión es una oficina creada por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) con el fin de estimular la defensa hemisférica del derecho a la libertad de pensamiento y expresión, considerando su papel fundamental en la consolidación y el desarrollo del sistema democrático.

La CIDH es un órgano principal y autónomo de la Organización de los Estados Americanos (OEA), cuyo mandato surge de la Carta de la OEA y de la Convención Americana sobre Derechos Humanos. La Comisión Interamericana tiene el mandato de promover la observancia y la defensa de los derechos humanos en la región y actúa como órgano consultivo de la OEA en la materia. La CIDH está integrada por siete miembros independientes que son elegidos por la Asamblea General de la OEA a título personal, y no representan sus países de origen o residencia.

No. R179/24

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